Los phisers se lo curran

Todos hemos recibido ya muchos correos de supuestos bancos (en los que muchas veces ni siquiera tenemos cuenta) que nos piden que introduzcamos nuestros datos utilizando diversas artimañas. Como es un tema al que tampoco he prestado demasiada atención, quizás lo que voy a contar ahora no sea nada nuevo, pero ayer me sorprendió descubrir un intento de phising relacionado con Segundamano.com.

Mi mujer puso un artículo a la venta hace 3 días, pagando el importe correspondiente, y comprobando que el artículo se había publicado correctamente. Sin embargo, ayer recibió un mensaje supuestamente de Segundamano, en el que se le comunicaba que existía un problema con el pago del anuncio, que iban a proceder a retirarlo y que debía volver a enviar los datos de la tarjeta. A estas alturas estamos todos más que curados de espanto, y además mi mujer también tiene formación técnica y trabaja en el sector bancario, por lo que rápidamente se mosqueó, contestó al correo pidiendo más detalles y explicaciones y, evidentemente, no recibió contestación. Por eso, esta mañana buscó directamente un correo «oficial» de Segundamano y les mandó la información, recibiendo como respuesta una confirmación del intento de phising.

En el fondo, me divierte ver cómo se van adaptando a las situaciones, como cambian de artimañas y de tipo de webs, y como mejoran las formas: estaba muy «currado» e incluso parecía escrito por alguien que conoce perfectamente el idioma (en lugar de ser una traducción automática). Pero vamos, aunque de primeras me divierta, lo siguiente que me viene a la cabeza es una expresión coloquial y descriptiva: ¡Estos cabrones…!